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| Acompáñala de una ensalada de canónigos con vinagreta de mostaza |
Hoy hemos preparado una receta muuuy rica. Claudia echaba de menos la lasaña y decidí probar con algo diferente. Se trata de un plato sin gluten y sin lácteos, y a pesar de que lleva varias salsas, resulta bastante sencilla de hacer. El resultado me ha encantado, la crema de queso de nuez le aporta un toque amargo que me recuerda mucho al queso 'de verdad', y la combinación de las distintas salsas quedó deliciosa.
Los
ingredientes son estos:
- Placas de lasaña sin gluten (de maíz)
- Semillas de lino
Para la salsa de tomate:
- 1 lata de tomate triturados
- 1 cebolla
- 1 pimiento verde
- 1 zanahoria
- Orégano, sal, cúrcuma
Para la salsa de hortalizas:
- 1 calabacín
- ½ berenjena
- Sal, pimienta negra, albahaca, perejil
Para la salsa de queso:
- Un tazón de nueces de Brasil
- 1 C de levadura de cerveza
- Eneldo, perejil, albahaca, tomillo, sal, pimienta negra, nuez moscada, cebolla en polvo, ajo en polvo
Para la bechamel:
- 1 l de leche de soja
- 130 g de harina de arroz
- 50 g de aceite de oliva
- Sal, pimienta blanca, nuez moscada
Preparación
Salsa de tomate:
Rehogamos la cebolla, zanahoria y pimiento troceaditos, y añadimos el tomate. Agregamos sal, cúrcuma y orégano, y cocemos unos 20 minutos. Reservamos.
Salsa de hortalizas:
Cortamos el calabacín y la berenjena a cuadraditos, y los rehogamos en aceite de oliva al que iremos añadiendo un poco de agua. Agregamos sal, pimienta negra, albahaca y perejil. Reservamos.
Crema de queso:
Ponemos en remojo las nueces, y las escurrimos 2 horas después. Añadimos un litro de agua y trituramos bien. Colamos con una bolsa de tela. Obtenemos, por un lado, bebida de nuez, a la que podemos añadir una pizca de sal y una cucharada de miel, y tomarla fresquita; y por otro lado, la crema que emplearemos en nuestra receta. Esta la colocamos en un bol, y añadimos 1 C de levadura de cerveza, 1 c de cebolla en polvo, 1 c de ajo en polvo, 1 pizca de nuez moscada, sal y pimienta. Si es necesario, añadimos líquido para obtener la consistencia cremosa que nos guste.
Bechamel:
Calentamos el aceite, añadimos el harina y removemos. Añadimos la leche de soja, sal, pimienta blanca y nuez moscada, y removemos hasta que espese.
Cocemos las placas de lasaña en abundante agua y las escurrimos.
Ya tenemos todo listo para montar la lasaña: engrasamos una fuente de horno y alternamos capas de pasta con salsa de tomate, salsa de hortalizas con bechamel, y crema de queso de nuez. Terminamos con una capa de bechamel sobre la que espolvoreamos semillas de lino. Horneamos 30 minutos a 180ºC. Bon appetit!
- 2 tomates
Esta mañana amaneció soleada, hay que aprovechar para ir a la playita. No hay tiempo para desayunos muy elaborados... Voy a preparar un batido fresquito con plátano, melocotón y espirulina. El resultado es ¡delicioso! Aquí tenéis la receta:
Quiero recomendaros un libro que me ha gustado mucho. Ahora están muy de moda los batidos verdes. Eso tiene una parte muy buena: el poder llegar a mucha gente; y otra no tan buena: si es una moda, como viene se va. Por eso es interesante profundizar en los beneficios que nos aporta el consumo de vegetales, en particular los de hoja verde. Los batidos nos permiten tomarlos en gran cantidad, y de este modo mejorar notablemente el aporte nutricional a nuestro organismo. Victoria Boutenko explica muy bien el proceso que le llevó a incorporar estos preparados a su dieta crudivegana; el equilibrio entre ácidos grasos omega 6 y omega 3, y cómo los vegetales son una fuente extraordinaria de aminoácidos esenciales, vitaminas y fibra. Todo ello salpicado de anécdotas que hacen muy amena la lectura. Por supuesto, no faltan las recetas.